martes, 28 de julio de 2015

Delincuente

Dicen que los besos robados
solo son condena
para el dueño.
Como pasa con casi todo.

La cosa es cuando ya no son solo besos
lo que te roba una persona.

Es entonces cuando te has metido en un lío
porque o bien estás condenada a ser víctima
o ya formas parte del bando criminal,
es decir,
que ya eres una jodida delincuente.

Y como pasa siempre;
después del delito
es casi imposible salir intacto.

El otro día desperté entre otras sábanas
y mi primera reacción no fue otra
que llorar lágrimas de alegría
porque no eras tú de nuevo 
el ladrón de mis sueños
y era otro el que ahora
se metía entre mis pesadillas
o mis piernas
o mis mil gritos silenciosos
que solo pueden robarse
entre suspiros con sabor a madrugada.

Era todo demasiado bonito
como para largarse sin pasar por juicio.

Los arrestos son mejores
amarrados al cabecero de la cama
y las confesiones
susurradas a oídos de desconocidos.

Eso lo saben hasta los del calabozo.

Aunque para mí,
realmente
la verdadera condena 
es desconocer el nombre
de aquel que ahora
hace que grite apretando los dientes
entre estas cuatro paredes
cada uno de mis crímenes.

Por eso una vez que entras en la vida del fugitivo
es difícil salir de ella,
porque no es lo mismo robar
que ser robado
aunque en todos los casos
termines con la otra persona
-o antes
o después-.

Y ahora es más complicado de lo que parece
deshacerse del gamberro
que te grita en el oído izquierdo
que te pongas tu mejor perfume
te vistas con tu minifalda
y corras a hacer vandalismo
a cualquiera
que no se lo merezca.

Ahora son cadenas 
lo que llevo amarrado a las caderas
y condenas 
todo lo que puedo arrastrar.

Maldito ladrón 
que roba de todo
menos miserias.

Maldito aquel 
que cometió tal homicidio
y condenó a esta pobre chica
a robar de donde no hay
y fugarse de donde no debería.

Blue

Since you've gone I feel the change
Everything is old, nothing is the same
Another weird world is my bed today
Empty, cold, sad, alone... who can I blame?

Now I'm seeing your glance -if I close my eyes-

Hearing your peals of laughter so high
Feeling your skin like my paradise
And my tears dry, and my body dies 

Listen to me; this isn't the last text I will write to you

Nobody else can make me feel the same love for someone new
I hide many things I want you to know that can sound like taboo
You said it was love but you didn't know me, my favourite color is blue!

Your memories are stronger than caffeine

That's a lot of pain for only seventeen
I think that now is easier being mean or obscene
My life is in this moment like a broken machine

I want to be the perfect girl you wish, that's all

Believe me; my heart stains of blood too slow
I want to have your love again, maybe I can haul 
Don't play, my bane, with my dreams to baseball

Listen to me; this isn't the last text I will write to you

Nobody else can make me feel the same love for someone new
I hide many things I want you to know that can sound like taboo
You said it was love but you didn't know me, my favourite color is blue!

So what can I do?

Because you've gone already and I don't know why
So what can I do?
Because I gave the best of me and you said goodbye
And now I'm quite confuse
Did I say something bad? Did I say something right? 
I can't stop loving you
You were always my favorite guy 

But now you've gone and I do not miss you, dearly pal

I only count the time and wait anxiously your arrival
It was an obsession and you ever wouldn't have a rival
Because the love of yesterday was unnatural

But now it's broken and everything is in the past so


Listen to me; this is the last text I will write to you

Nobody else could make me feel the same obsession for someone new
I hid many things I want you to know, but the wind already blew
You said it was love... and now look at us, we are separately two.

viernes, 24 de julio de 2015

24

Lo jodido de todo esto,
-entiéndase como existencia-
es que todo está dado la vuelta:
los ricos están rodeados de riqueza
y los pobres están rodeados,
amarrados,
esclavizados,
y censurados.

Y es fácil saber de quién es la voz del pueblo

y quién tiene realmente el altavoz.

La vida no es justa,

ni tiene sentido,
pero nadie dijo nunca que tuviera por qué serlo.

Los locos hablan

y los cuerdos se encargan de ellos
porque no están locos
y porque también hablan
pero no como los primeros
sino con cordura.
O así es como llaman a su locura en general.

Porque quién es el que decide

quién está sano
y quién enfermo.

Quién es el que rige

que Dios existe
y que puede ver todo lo que haces
pero no hablarte
dentro de tu cabeza.

Los niños quieren ser mayores

porque quieren libertad
y no se dan cuenta
de que cuando realmente eres libre
es cuando aún eres un niño.

No hay manipulaciones,
deudas,
cadenas
ni amor.

Permitidme que esto último

lo cuele dentro de la lista
de las diez peores cosas que nos podrían pasar
o tal y como empieza este escrito sin sentido
lo jodido de la existencia
y las ironías de la vida, que está hecha entera del revés.

La vida no tiene puto sentido.

No hay más que hablar.

jueves, 23 de julio de 2015

Sin sentido

Estábamos destinados a ser incoherentes
y aún no lo entiendo.

Todo funcionaba del revés.


Pero qué bien encajaba todo dado la vuelta,

y qué bonita era la vida
con los pies en las nubes
aunque eso significara a veces
mantener la cabeza en la tierra.

lunes, 20 de julio de 2015

Arte y literatura

Prometí escribirte cada vez que recordarte
fuera el equivalente
a una sonrisa.
Dejé de hacerlo al tercer día
porque todos tus recuerdos
eran demasiado bonitos
como para solo sonreír,
y porque ya no había sonrisas
sino lágrimas de alegría,
de tristeza,
de emoción, 
de vida.
Lágrimas de vida y pelos de punta.

Todos los versos sabían a tu ausencia.
Todas las rimas a tu sombra.
Todos los ritmos a tu vacío.
Todo el mundo entero se quedó en blanco.

El problema de la poesía es que es más bonita cuando duele,
cuando rasga las arterias
y pica y escuece por dentro del alma.
El problema es que la poesía nos convierte en adictos al desamor,
al desengaño,
al frío, 
a la soledad,
al miedo,
a la impotencia,
al dolor,
y al amor.
Y esto último es lo más peligroso.
Y esto último es como jugar con fuego empapado en gasolina.
Como nadar sin brazos en un lago repleto de cocodrilos.
Como caminar por una cuerda floja con los ojos vendados,
obligado a dar un paso más
y siendo completamente consciente
de que si ese paso es en falso
la caída hacia el abismo será la perdición.
Y así mismo el final de una locura insana
que no habrá hecho más que comenzar.

Y aún sabiendo todo esto,
habiéndolo estudiado de principio a fin,
de arriba a abajo,
de derecha a izquierda,
y del derecho y del revés
te escribo.
Otra vez más.
Jugando con fuego,
nadando sin brazos,
manteniendo el equilibrio,
tentando a la suerte.
Y lo hago porque es lo que dicta la poesía,
y lo que gritan todas esas voces, 
porque fuiste todo lo anterior,
lo que hace falta convertir en letras,
porque fuiste arte
y sabes de sobra a lo que me refiero.

Y ya lo sé,
han pasado más de tres días,
y de trescientos,
y de tres mil,
y ya debería haber dejado de escupir versos
que ahora solo están vacíos
y perdieron el sentido
hace más tiempo del que quiero reconocer.
Pero ya no puedo hacerle nada
porque olvidaste donde dejaste las llaves
y yo no puedo salir sin cerrar.

Prometo escribirte cada vez que te recuerde
de nuevo,
y disfrutar cada instante que tu manera de caminar
se pasee por mi pensamiento
otra vez más.
Prometo no dejar de hacerlo nunca
aunque ya no sean sonrisas lo que me sacas,
aunque ya no estés conmigo
ni vayas a estarlo nunca más,
-porque fuiste más que una presencia
o una locura
o una mentira,
fuiste todo lo que siempre quise,
fuiste arte y literatura-.

sábado, 4 de julio de 2015

La chica de los trastornos

Loco es aquel que habla de locura sin mencionar el vaivén de sus caderas.

Es la persona cuerda más tocada que he conocido jamás.
Es incapaz de dejar de leer sin terminar el capítulo. 
Y después de ese siempre viene el ''uno más y lo dejo''.
Canta frente al espejo y rasga las cuerdas de su guitarra imaginaria al ritmo que le da la gana.
Baila en la ducha porque tiene más riesgo.
Todas las mañanas pone el despertador cinco minutos antes porque siempre quiere dormir cinco minutos más.
Unta la tostada entera y deja más de la mitad.
Tiene guardadas más de cien canciones y siempre empieza por la misma.
Escribe con bolígrafo negro porque el negro combina con todo.
Inventa historias donde no las hay.
Y miente porque la vida es demasiado corta.
Siempre piensa en frío porque es adicta a las venganzas.
Aunque dentro quema a más de ciento ochenta grados.
Fuma cigarrillos a escondidas y luego conecta otra vez la alarma de incendios.
Engulle chicles como si el mundo se acabara.
Piensa más en ayer que en mañana.
Cada vez que enferma piensa que va a morir.
Y cuando se recupera quiere enfermar de nuevo.
Es incomprensible.
Se pone botas porque dice que así puede pisar más fuerte.
Susurra los te quiero para que sean suyos y de nadie más.
Cuando llueve se quita la capucha.
Cuando nieva no pisa la nieve.
Dice que su sonido le da escalofríos.
Y qué guapa está cuando se le congelan las mejillas.
Y qué guapa está cuando algo le da rabia.
Escribe poesía aunque no sabe rimar.
Escribe prosa aunque no sabe soñar.
Viaja a la luna.
Se recoge el pelo porque así ve más mundo.
Sonríe como una niña sin dientes.
Y llora como un cachorrito.
Todas las noches puedo ver como muere.
Y todas las mañanas como nace de nuevo.
Cada vez que se ríe le entra el hipo.
Da abrazos de oso y besa como la última vez.
Odia con todo el cuerpo y asesina con la mirada.
Da saltos de alegría por un helado de frambuesa.
Su colonia huele a que todo va bien.
Y su casa por la mañana a café con leche y dos de azúcar.
El cine le da sueño y la piscina, hambre.
Para ella el frío es demasiado frío y el calor demasiado caliente.
Me roba la manta todas las noches.
Siempre se olvida de ponerse pendientes.
Se hace doscientas mil fotos y borra trescientas mil.
Se baña en sujetador.
Cuenta las estrellas para saber cuántos deseos le quedan.
Nunca apaga la luz del pasillo.
Camina descalza por casa y patina en calcetines.
Odia el silencio porque parece que el mundo se para.
Y ella siempre está en movimiento.
Mira las calorías y después se termina el paquete.
Comparte todo menos opinión.
Se pinta las uñas porque sino las siente desnudas.
Se arranca la piel de los labios.
No come tarta en su cumpleaños.
Graba películas y luego nunca las ve.
Es acuario, pero siempre dice cáncer.
No se maquilla porque odia desmaquillarse.
Le gusta estar sola.
Le gusta ser suya.
Hace daño sin querer.
Piensa mirando el suelo y dibuja con los ojos cerrados.
Está enferma por dentro y su cabeza tiene mil demonios.
Y la vida le puede.
Y ella puede conmigo.

Siempre ha sido la más fuerte de los dos.

Vive.

Muere.

Se desnuda el alma y entonces es la chica más bonita de la Tierra.
Quiere de mentira porque de verdad le duele.
Está como una jodida regadera.
Pero su locura no es comparable con la que siento yo por ella.
Está loca, ella es la mismísima locura.
Está hecha de trastornos.
De amor. 
De vida.
De deseo.
Y yo estoy loco por ella.
Por sus trastornos y por sus te quiero.